Por las mañanas casi todas tenemos cara de acelga (unas más que otras) y cuando nos lavamos la cara, el pelo y elegimos la ropa estamos haciendo uso de todos nuestros conocimientos de peinado, moda, tendencias, maquillajes y secretos de cuidado personal. Cada cual adapta su estilo propio y personal para obtener un resultado lo más favorecedor posible. 

Sin embargo, no siempre se consigue porque muchas veces  no tenemos ni idea de cómo hacerlo. Por eso, cada vez están más a la orden del día los asesores de imagen personal, los cursos de automaquillaje y las personal shopper para ayudarnos un poco. Y es que hay algunos casos en los que resultaría prioritario. 

Cuéntame qué te parece este cambio de imagen real como la vida misma. ¿Qué le pondrías o le quitarías a la imagen final? ¿Se te ocurre alguna idea para mejorar el estilo de esta chica? Cuéntame…