¿Pieles blancas contra morenas? Y es que si hace algunos años lucir un color de piel tostado era signo de distinción, belleza, clase, salud, y hoy se ha convertido en todo lo contrario: de estético ha pasado ha ser antiestético, de saludable a enfermizo.
Pese a que la moda haya cambiado mi amiga Rebeca no se conciencia. Es una adicta a los rayos UVA y al sol, da igual verano que invierno, el caso es no perder el color. Hace caso omiso de mis advertencias, llamándome exagerada, y no se da cuenta del peligro de su obsesión. ¡Estás enferma! Le decía en broma, hasta que hace poco descubrí que existe como tal esta patología y que tiene un nombre: Tanorexia
Las personas que la padecen están obsesionadas con estar morenas a toda costa y nunca suelen estar conformes con su color de piel. El perfil de este grupo se enmarca dentro de un target de edad de entre 20 y 40 años, aunque se han registrado casos de niñas de 16. Afecta más al sector femenino que al masculino, aunque cada vez son más los chicos que caen en esta nueva adicción.