Muchos pacientes con enfermedades respiratorias graves continúan fumando incluso cuando su estado llega hasta el punto de necesitar tratamiento con oxígeno domiciliario. De hecho y según se ha puesto de manifiesto en el Estudio TOMA (Tabaquismo en pacientes con Oxigenoterapia crónica domiciliaria en la Comunidad de Madrid) “el 5,4% de los pacientes mayores de 40 años con este tratamiento confiesa seguir fumando, cifra que aumentaba al 18,3% en los pacientes de entre 40 y 60 años. Casi el 20% DE LOS PACIENTES CON OXIGENOTERAPIA CONTINÚA FUMANDO. Menudo vicio, qué devastadora adicción. ¿Qué hay detrás de los cigarrillos que provoca esa dependencia? ¿Lo saben las autoridades sanitarias y el gobierno que tanto prohiben? ¿Conocen el antídoto para el veneno?