La mujer española está claramente a favor de la belleza real y la sinceridad por parte de la prensa femenina. ¿En qué se parecen las fotografías que aparecen en las revistas de moda a las mujeres que las leen o incluso a las propias modelos que posan en sus anuncios? El debate está sobre la mesa desde que hace unos días la revista alemana Brigitte anunciaba que a partir de 2010 utilizaría ‘mujeres reales’ en lugar de modelos. La mecha que ha encendido la polémica ha sido la famosa campaña publicitaria de Ralph Lauren.
El corsé, una prenda interior que en épocas pasadas era signo de distinción, lujo y elegancia entre las clases altas de la sociedad, suponiendo un gran martirio para toda aquella que se viera sometida a su uso. Hoy en día, se convierte de la mano de Maya Hansen en un artículo de deseo, sexy, erótico y atrevido donde prima la comodidad.
La alta costura es un arte de la moda que desfila cada temporada con mucho lujo. Aunque también se cotizan al alza los diseños vintage de marcas reconocidas, verdadero objeto de culto para coleccionistas. Y luego está Zara y otras marcas para los que nos somos ricos del todo.
¿Qué es la alta costura o haute couture como dicen los franceses? Terminadas las pasarelas oficiales de la temporada cuando se desvelan todos los grandes diseños parece que la moda queda relegada a un segundo plano.
Los creadores tanto como los seguidores del fashion mundial se mueven en círculos de lujo. Estamos hablando de alta costura con mayúsculas, un sector que mueve al año grandes cifras de euros, dólares y yenes. Incalculables, además todos sabemos que la mayoría de esas cifras son tan inventadas como los petrodólares y eso que de economía no sé un pimiento.
Os sonarán firmas como Chanel, Dior, Roberto Cavalli, D&G, Jean Paul Gautier… Algunas mujeres gastan miles de millones al año para poder vestir una glamourosa prenda de alguna de estas firmas. Todas las prendas son hechas a medida y por supuesto, son modelos exclusivos. Imposible lucir el mismo vestido porque sólo existe uno, el que llevas puesto. Aunque siempre te puedes encontrar por el camino con alguien que lleve una copia de Zara bastante parecida.
El mundo de la moda es una gran élite compuesta por clientes millonarios que son grandes desconocidos para la prensa. Provienen de familias adineradas, les apasiona la moda y en sus vestidores hay más firmas de lujo que en unos grandes almacenes.
Nadie duda ya que la alta costura es una forma de arte que cuenta con un nutrido grupo de coleccionistas. Comprar una prenda de estas firmas es una inversión a largo plazo porque con el paso del tiempo el vintage se cotiza todavía más. En definitiva, la alta costura tiene un precio que no todos podemos pagar pero sí nos podemos permitir el lujo de seguirla por puro placer y con la máxima sorpresa.
Siempre podemos improvisar y seguir las tendencias de otoño/invierno 2009/2010 con un trapito de allá y otro de acá.
Cuéntame… qué haces para seguir la moda de temporada?
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