Pensad que un día mientras paseáis por la calle veis al hombre de vuestra vida… Casualmente, llamémoslo azar, destino o bien suerte, el susodicho también se siente atraído. Llega el momento de presentaciones, obviamente dos besos ¡mínimo!
Y sucede… ¡aaaggg…! Pincha y además raspa con la barba… ¡fatal!
En estos momentos debemos hacer dos cosas: la primera que vea el siguiente vídeo de Gillette y la segunda decirle que se compre urgentemente una cuchilla para afeitarse la barba.
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