Los brazos son una de las partes del cuerpo que más sufren el ataque de la gravedad. La parte posterior de los brazos suele cobrar vida propia con el paso del tiempo y descolgarse con facilidad.

La armonía en el tamaño y forma de los brazos depende tanto de la atención prestada a los bíceps, tríceps y antebrazos como a los hombros. Éstos últimos integran los brazos con el torso uniéndolos a los músculos de la espalda, cuello y pecho.

En Belleza Pura os vamos a enseñar unos sencillos ejercicios para construir unos brazos de acero.


Es muy fácil. Si no tienes a mano un par de mancuernas, puedes utilizar una botella de 500 cc de agua, un brick de leche o una lata de legumbres. Sólo es necesaria constancia.

Para trabajar los tríceps y el músculo posterior del brazo, con los brazos a los costados, empuja con tus manos hacia atrás y sostén la posición haciendo pequeños movimientos en el lugar (trabajo de tríceps músculo posterior del brazo) hasta sentir el esfuerzo en la parte posterior del brazo.

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Para trabajar los bíceps y el músculo anterior del brazo, con los codos cerca de ti, dobla y estira los codos acercando las manos a tus hombros. Repetir varias veces por aproximadamente cinco minutos. Así trabajas desde el codo y luego desde el hombro el músculo bíceps músculo anterior del brazo). Repetid también varias veces. Echad un vistazo al vídeo y tomad buena nota.

Los brazos son muchas veces los grandes olvidados de nuestro cuerpo, solemos estar más pendientes del vientre, los glúteos o las piernas y cuando llegamos a determinada edad se vuelven algo flácidos. Con estos ejercicios no tendréis ese problema, con sólo 8 minutos al día tendréis unos brazos perfectos.