En una boda, entre las mayores preocupaciones de una novia están el vestido y el peinado. Pero las joyas juegan un papel muy importante y si las eliges bien, serán lo único que puedas volver a utilizar en otras ocasiones, con toda seguridad, será lo que más amortices. Otras veces, algunas de las joyas que luce la novia son herencia familiar, pasan de generación en generación o son prestadas, por eso deberás combinarlas con el resto, no mezcles estilos, colores y metales.
Pero sea como sea, a la hora de elegirlas tu máxima debe ser ‘menos es más’.
La elección de las joyas siempre irá determinada por el vestido y por el peinado. Y para mi, en lo que a joyas nupciales se refiere, cobran un protagonismo especial los pendientes (con permiso de los anillos). Son obligatorios. (más…)
Descansando antes de ponerse sus zapatillas preferidas
Converse, las zapatillas deportivas más deseadas, ahora con estampados.
Ah, las zapas. Todo un mundo de sutilezas, de detalles, de distintos diseños y distintas comodidades, de capitulaciones y de amigable reconocimiento entre usuarios.
Me aficioné a las Converse en la adolescencia, cuando tuve un novio algo más bajito que yo y, sintiéndome excesivamente zancuda para los cánones –cosas de la edad-, me enganché al calzado más plano que pude encontrar.
Con buen tino, por cierto. No sólo es que sean muy de mantener a raya la autoestima de churris más bajos que una, sino que además las encuentro ciertamente estilosas. Las All Star de caña alta (Chuck Taylor All Star High, nombre oficial) han sido mi modelo preferido desde entonces. He tenido unas cuantas y mantengo en activo un par al que tengo especial cariño, en blanco y con los cordones rosas.
Ver unas Converse por ahí me produce un cosquilleo especial. Llaman mi atención inmediatamente y tengo que seguir trepando por la anatomía de quien las porte, a ver qué otras cualidades le adornan.
Es un calzado muy pop, sí. Hay otras zapas aún más molonas. Pero, ¿a que éstas tiene su qué? Pues claro que lo tienen, hombre, ‘descarao’.
La verdad es que tiene que ser difícil tener una madre como Carolina Herrera, tan guapa, tan elegante, con tanto éxito… Pero la hija de la diseñadora venezolana también tiene mucha personalidad y desde hace años es la directora creativa de fragancias de la firma. No huye de la elegancia pero ella es más neoyorkina, más práctica, más del siglo XXI por eso sus creaciones se dirigen a mujeres modernas, independientes y seguras de sí mismas.
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