Me imagino que te debes de estar estrujando el cerebro haciendo la lista de regalos para toda la familia y los amigos para estas navidades. Todas queremos ser originales pero me temo, que al final, somos bastante predecibles según consta en un estudio realizado por la consultora Deloitte.
De cara a las fiestas de Navidad la tendencia general es a regalar lo de siempre: perfumes, cosméticos y masajes. ¿Y por qué? Supongo que es por su capacidad de emocionar y porque es una manera de regalar un ‘viaje ‘ o una ‘experiencia sensorial.
Según este estudio, a pesar de la crisis, España es el país más optimista dentro de la zona euro ya que un 23% de los encuestados considera que su situación económica mejorará en el 2012. Parece mentira, ¿no? Esta capacidad de ilusión nos hace sentirnos más generosos y querer hacer regalos a pesar de los malos tiempos que llevamos sufriendo desde hace unos años.
Y si el regalo navideño ofrece, además de ilusión, ‘experiencias’, mejor que mejor. Por eso regalar perfumes y cosméticos es tan popular, porque es práctico, no es caro y tienen un componente emocional bastante fuerte. Yo todavía me acuerdo del primer perfume que me regalaron. Tenía 12 años y fue mi madrina: ‘Eau de Calandre’, de Paco Rabanne. Creo que ha sido el perfume al que he sido más fiel.
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