Vuelvo de París con un frescor acuático en la cara y un sabor dulce en la nariz, del nuevo aroma que nos traerá el otoño a las perfumerías. Bueno, también he vuelto un poco plisada del viaje, he visto plisados por todas partes: en la tienda de Issey Miyake, en la presentación había bailarinas con plisados multicolor. El diseñador nipón ha seguido plisando sus modelos y haciendo origami sobre ellos, creando arquitecturas poliédricas en sus monísimos bolsos Bao Bao de 525 € de plástico reciclado. En lámparas de fibra de vidrio diseñadas con fórmulas matemáticas por ordenador y en modelitos un tanto imposibles. Y es que las ideas se pagan, al menos en moda. Pude ver a algunas clientas comprando.
De las periodistas que fuimos a la tienda nadie compró nada y eso que nos hacían un 30% de descuento en moda y un 10% en los bolsos, pero nadie se rascó el bolsillo. Cómo está la profesión… Por la tarde nos fuimos de compras a una tienda vintage de ropa de segunda mano en Le Marais. Era un tanto asquerosito todo. Bueno, yo tampoco compré nada y me tenía que salir cada 5 minutos para no respirar tanto ácaro suelto. Y tengo que reconocer que sí he comprado en tiendas de segunda mano, sobre todo en Londres. Y soy consumidora vintage del armario familiar desde que era adolescente. Sólo compré algo en Baby Gap, un vestido genial de mariposas para una amiga y una camiseta solar para mi actual punto G, mi Gabriela, un bombón dulce y salado de 17 meses.
La nueva fragancia es algo infantil y juvenil, dulce, movida, colorista, naïf y por supuesto, Plisada, por favor.
Una barba superlativa a lo Devendra Banhart puede ser un aderezo capilar masculino hipster atractivo y resultón.
Nadie negaría, tampoco, el favor que puede hacer una perilla bien atusada, un bigotito atildado o unas patillas de rock clásico coronadas por un esculpido tupé.
Si tu objetivo, en cambio, es el look lampiño perfectamente apurado y terso, te mostramos un par de novedades que te servirán de bastón de apoyo para recorrer el camino. Un camino liso y sin obstáculos que podrás andar a la manera tradicional o con tecnología puntera.
Llegan los calores veraniegos, las pieles grasas sufren especialmente y los brillos se convierten en la peor pesadilla –aunque no todo es malo, os diré que envejeceréis más tarde, quien no se consuela es porque no quiere-. Las glándulas sebáceas, en entornos con mucha humedad o con altas temperaturas están más activas, además, con el calor, se hace más líquida la grasa superficial de la capa hidrolipídica de la piel. Pero no hay que perder la calma porque la cara brille al mismo nivel que el sol, existen pequeños y sencillos trucos para mantener a raya el exceso de grasa de tu piel en verano.
Si las cremas que utilizas durante el resto del año te engrasan demasiado, opta por aquellas que sean más ligeras. Por ejemplo, si notas que tu crema de noche es demasiado untuosa para esta época, puedes cambiarla por una de textura más ligera o sustituirla por un sérum hidratante, pero nunca dejar de utilizar un producto para la noche. Los cuidados en verano son igual de importantes que invierno, durante el día, el sol, el calor y el ambiente demasiado seco en algunas partes de España, hacen que el proceso de reparación durante la noche sea imprescindible. También es fundamental para mantener la piel hidratada, sin por ello, aumentar los brillos, beber agua suficiente. (más…)
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