Seguro que no se te ha pasado por alto el cambio. Algo ha hecho click, salpicando el paisaje con relucientes rosas, amarillos, verdes y azules. La primavera ha llegado para cambiarlo todo. También el maquillaje asume la pauta y da unos pasos en la escala cromática. Abandonamos el pantone de fríos y nos acercamos hacia el cálido fuego. ¿Nuestra apuesta ganadora? Todo al naranja. Un matiz alegre y tropical, rico en expresiones que favorecen a todos los tonos de piel.
Esta primavera emulsionamos el pálido nude con los pigmentos naranja. Una Blancanieves muy enterada que picotea un poco de todo y revela un look sofisticado.
La idea, una base resplandeciente –y ya sabes, de esa naturalidad que exige buenos genes, mejor cosmética y no poca mano de obra-. Sobre ella encenderemos una hoguera naranja tan hipnotizante como el fuego. La boca arde, arde y arde.
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