Los emulsionantes forman parte de nuestra dieta de manera soterrada: es uno de los ingredientes permitidos por la FDA (Food and Drug Administration) más empleados en la comida procesada.
¿Cómo reconocerlos entre tanto nombre raro de las etiquetas? Conociendo sus múltiples presentaciones en panes, galletas, salsas, helados y demás habituales del Súper. A saber, polisorbato 80, lecitina de soja (ingrediente natural), carragenato, poligiceroles, xantano y otras chicas del montón.
Caveat, emptor, que estos compuestos no se encuentran sólo entre las marcas convencionales, sino también en las etiquetadas como ‘light’ o ‘saludables’ (sin lácteos, gluten o bajos en azúcar y grasa), orgánicas o alimentos no transgénicos. El problema no es tanto su uso ‘indiscriminado’ como si realmente representan algún problema para la salud.
Hemos abierto línea de consulta con la Dra. Segurado, asesora dermatológica de Nivea, una de las marcas más especializadas en el uso de la coenzima Q10 en cosmética, un activo del que se habla a menudo sin saber muy bien que propiedades tiene.
A mí me sorprende que se utilice tanto para combatir el envejecimiento de la piel como para combatir la flacidez y la celulitis.
“La coenzima Q10 protege del deterioro del colágeno y la elastina, retrasando la aparición de arrugas y la flacidez. Por otro lado al aumentar los fibroblastos, aumenta la producción de colágeno y ácido hialurónico que proporciona mayor firmeza a la piel” aclara esta dermatóloga, entre otras dudas a las que nos responde en la siguiente entrevista.
Spanish