No es por halagar a la marca, pero si me preguntaran que cuál es la colonia fresca que más me ha gustado y sorprendido de los últimos años diría sin duda que el Eau de Thé Vert de Bvlgari.

La nueva Aqua Divina no me parece un hallazgo tan increíble, pero sí una joya del lujo rescatada del fondo del Mediterráneo y con el sello inconfundible de Bvlgari.

anita ekberg

 

Reconozcamos que, cuando apareció la de té verde, en 1992, fue un chispazo de novedad. Ahora el té verde está en las comidas, en la nueva cocina, en el chocolate, pero por entonces era maravilloso sentir esa estela tan semioriental que olía a fresco y a limpio con toques de mandarina, lima, naranjo. Y que quizás era demasiado cara como para usarla en plan ‘colonia de baño’, con aquel frascote tan grande… Desde entonces han nacido muchos nuevos perfumes y eau de toilettes bulgarianas: Rose essentielle, Omnia Crystalline, Bvlgari le parfum y la nueva Aqua Divina.

Todas, para mí, tienen una esencia, un marchamo que las distingue: sus raíces griegas y romanas: todas tienen un trocito de aquella islita de la película Mamma Mía, algo de sensualidad decadente, como las películas de Visconti, un poso del ‘Vacaciones en Roma’ de Audrey Hepburn y siempre las notas del limoncello napolitano, del pomelo, de los cítricos, de la bergamota…

Aqua Divina es otro eslabón de la cadena mediterránea, pero más sofisticado. Tenía que ser nuestro Alberto Morillas, con quien tanto bailé en una Feria de Sevilla, el que aunara sal, jengibre, magnolia, membrillo, ámbar, cera de abeja en el mismo perfume; todo suena a ungüento de los antiguos faraones, a pócimas encontradas en un ánfora de Ampurias.

Esta vez la modelo es Magdalena Frackowiak , también con aire de Ornella Mutti de joven, a la cantante Mina en los 60. Una diosa que brota del mar como una Venus de Milo … parece en la foto.

¿El frasco? Una enorme perla nacarada adornada con un babero de oro rosa…todo tan boticcelliano que cómo no abrir este post con esa foto. Bienvenidas, pues, las aguas de Bvlgari, una marca tan italiana o más que los espagueti bolognesa, la tarantella, Enrique Caruso o la rebosante Anita Ekberg, que se nos acaba de ir sin que por ello la olvidemos en la mítica Fontana de Trevi.

Aqua Divina de Bvlgari. 25 ml. Precio: 47 euros.