¿Quieres una taza de té? ¿Rojo, verde, blanco? ¿Qué tipo de té tomas tú? Yo la verdad soy mucho más de café. Aunque me gusta mucho el té con aromas de chocolate, flores y canela. Pero, que le voy a hacer siempre vuelvo a mi tacita de café que es mucho más insano, aunque también hay que reconocer a la cafeína virtudes antioxidantes y ciertamente estimulantes igual que la Coca-Cola.

Sin embargo, el té es mucho más sano y hay que tener en cuenta que es la bebida más bebida del mundo, valga la redundancia. La cosmética y los perfumes también han adoptado a la mágica planta del té para sus fórmulas y aromas. ¿A quién no le gusta el perfume de té verde de Bulgari o de Adolfo Domínguez?

La cadena especializada en diferentes variedades de tés, Tea Shop acaba de lanzar una línea de aromaterapia basada en el té verde para extender el aroma por toda tu casa. Además del perfume de té verde para la casa, también han desarrollado una vela aromática, incienso y varitas aromáticas. Ummm, me huele a té. En estos días me ape-té-ce.

Si además de sabor buscamos propiedades saludables para nuestra dieta, el color puede ser determinante. Hay muchos tipos de tés. Dicen los expertos que cada té tiene su momento y su ritual casi monástico.

“Todas las variedades proceden de la misma planta: Camelia Sinensis, lo único que cambia es el proceso de recolección, el tipo de fermentación y secado de la hoja” explica Barry Cooper, uno de los grandes productores de Té en Ceilán. Sin embargo, y según confirman diferentes estudios, el tratamiento de las hojas del té resulta determinante a la hora de medir sus beneficios. Las variedades con menos interés estético son el Té Oolong que es un té semifermentado, con una oxidación de unos treinta minutos y el Té Negro, totalmente fermentado, se deja oxidar o fermentar 90 minutos.

01. TÉ VERDE. Se elabora sólo con las dos primeras hojas de la planta enrolladas y secadas sin fermentar, deteniendo así su proceso de oxidación por lo que mantiene su color verde. Se ha comprobado que el té verde tienen un potente efecto antioxidante que actúa contra los radicales libres de una manera 200 veces más eficaz que la vitamina C. Se dice que una taza de este tipo de té equivale  a 12 zumos de naranja.

02. TÉ BLANCO. Es la gran esperanza blanca del té y la variedad con más potencia antioxidante. El té de la longevidad acaba de introducirse por primera vez en un producto cosmético y sus resultados son un 100% mejores que el Té Verde. Pero es un bien escaso. Se compone de los brotes más tiernos de la planta, por eso se llama también Agujas de Plata. Para obtener medio kilo de Té Blanco necesitaremos 80.000 brotes. Según datos de Estée Lauder, el Té Blanco es dos veces más eficaz en la piel que el Té Verde, porque contiene tres veces más polifenoles, la sustancia capaz de neutralizar los radicales libres. El primer producto que aplicó la tecnología del Té Blanco fue la firma de cosmética natural Origins y lo estrenó en el año 2002 con el nombre de “Perfect World”. Un mundo perfecto, que prolonga el bienestar de la piel y la protege como en una burbuja.

03. TÉ ROJO. Era la bebida de los emperadores chinos, también conocido como Pu-Erh Imperial, es uno de los principios básicos de la medicina china porque regula todas las energías corporales. Equilibra el Yin y el Yang, fomenta y depura los fluidos del organismo, y produce un efecto positivo contra la ansiedad y el estrés. Sin embargo, su reciente fama se debe a su extraordinario poder para reducir el sobrepeso y eliminar las grasas. Excelente depurativo, también reduce el colesterol y mejora la actividad del bazo. Sus maravillosas propiedades no se deben al debil proceso de oxidación de las hojas sino a todo lo contrario. Las hojas del té se pueden dejar madurar más de 50 años mediante una proceso de fermentación similar al de un buen vino. El auténtico Té Rojo Pu-Erh Oro puede llegar a costar hasta 420 euros/kilo.

Una taza de té puede convertirse también en un tratamiento de auténtico lujo. ¿Qué té tomas?