A propósito de una nota de prensa sobre Lullage, productos especializados en tratamiento del acné, os pongo alguna de las conclusiones sobre esta patología de la piel y su exposición solar:
1. El sol no favorece nada al acné. Al contrario de lo que se piensa no provoca su desaparición. Aunque el bronceado puede enmascararlo temporalmente causa más granos posteriormente.
2. Debido a la sequedad que se produce durante el verano los rayos UVA producen un engrosamiento de la piel y hacen que los granos regresen posteriormente con más fuerza.
3. Por último, un pequeño recordatorio sobre el sol. Adicionalmente aumenta el riesgo de contraer cáncer de piel y envejecimiento prematuro.
El tratamiento a través de Lullage consiste en desinfectar, equilibrar y regenerar la piel. Contiene toda una serie de productos libres de aceite que os invito a conocer a través de su página web.
¿Eres de las que está esperando a tomar el sol para acabar con sus granitos?