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Asisto perpleja a un nuevo caso de uso escandaloso del Photoshop, la polémica viene esta vez de la mano (bueno, una vez más), de Victoria’s Secret y de su esperado catálogo de la nueva colección de ropa de baño. Sus maravillosos ángeles, de cuerpos esculturales tampoco se escapan al uso indiscriminado del Photoshop, para convertirse en mujeres imposibles, aunque ‘afortunadamente’, en esta ocasión tienen todos sus miembros.

Todos asumimos que no hay fotografía que no se someta a pequeños arreglos, pero esto vuelve a superar todos los límites, han adelgazado a las modelos hasta conseguir cosas imposibles. Observa la primera foto, la modelo Candice Swanepoel tiene un cuerpo realmente extraño. Si miras la cadera en su lado derecho tiene un tamaño y un poco más arriba, al pasar el brazo y llegar a la cintura… ¡voilà!, ha venido el coco, le ha dado un mordisco y se ha quedado en la mitad, ¿qué te parece? El tamaño de sus hombros también es bastante desproporcionado. Y no es el único caso.

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Buceando por la web encuentro esta otra foto, muy similar a la anterior, aunque esta vez la increíble mujer menguante tiene el espectacular abismo entre cadera y cintura en el otro lado.

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Pero la cosa no acaba aquí, encuentro otro caso digno de ser investigado por los de CSI o incluso por el mismísimo House: ombligos que se mueven de sitio, ¿increíble, no crees?, ¿desde cuándo el ombligo tiene capacidad para moverse libremente por el cuerpo y situarse allí donde más le convenga?

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Y seguimos con el museo de los retoques… En este caso el Photoshop ha causado estragos en los muslos de la modelo a los que les separa una distancia abismal, ¿cómo pueden separarse tanto unos muslos?, por no hablar de la delgadez de sus piernas (que ese es otro tema para hablar largo y tendido). Pero aún siendo tan delgadas, eso no explica que estén tan separadas.

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No es la primera vez que Victoria’s Secret se pasa con los retoques, en febrero la damnificada fue la modelo Marisa Miller, a la que le quitaron, como quien no quiere la cosa, ¡un brazo!

Las fotos siguen en su web, así que por el momento, de arrepentimiento, nada de nada. Pero el daño está hecho porque, una vez más, el patrón para las adolescentes sigue siendo el de mujeres que nada tienen que ver con la realidad. ¡Queremos mujeres reales! Pero de verdad de la buena.