No sé tú pero yo soy de las que piensa que las casualidades no existen y el destino te lo forjas tú. Esto viene a raíz de lo que le pasó en sus inicios a Manolo Blahnik, seguramente el zapatero más famoso del mundo, y el único cuyos zapatos tienen nombre propio.

Cuando hablamos de unos ‘Manolos’ todo el mundo sabe de qué estamos hablando y es que desde que hace 40 años este diseñador canario dejó el mundo del teatro por el del calzado ha llovido mucho. El principio de todo fue fruto de que, en un viaje a Nueva York el joven isleño pidió una cita con la poderosa directora del Vogue norteamericano, Diane Vreeland. Al ver su trabajo y sus dibujos la gran editora le recomendó que se dejara de teatros y que se dedicara exclusivamente a los zapatos. Siguió su consejo y así es que Manolo volvió a Londres y en 1973 abrió su primera tienda en Old Church Street, en el barrio de Chelsea.

 

Desde entonces la fama de sus hormas y de sus tacones exquisitamente tallados han dado la vuelta al mundo. Su estilo es inconfundible y los tacones vertiginosos. Si te pruebas unos ‘manolos’ verás que, aunque parezca mentira, son muy cómodos, a pesar de sus 11.5 centímetros de altitud. Estos taconazos son todo un ejercicio de precisión, equilibrio y lujo. Y, aunque evidentemente no son para pasarse el día entero caminando, las que los llevan con asiduidad hablan maravillas.

 

 

Pero este calzado está más allá de las modas y las tendencias, son verdaderos objetos de culto fetichista. Según Blahnik, “los zapatos ayudan a transformar a una mujer”. Algo así debió de pensar Jaime de Marichalar cuando, como regalo de bodas, obsequió a Leticia Ortiz, futura princesa de Asturias,  con sus primeros ‘manolos’. También Sarah Jessica Parker en la serie ‘Sexo en Nueva York’ ayudó a extender la fama de este zapatero real. Carrie Bradshaw es una adicta a los zapatos y aunque de vez en cuando le es infiel con Jimmy Choo, siempre ha declarado su amor por sus ‘Manolos’.

Otra fan que ha contribuido a la fama de este calzado es Bella Swan, la protagonista de la serie de películas ‘Crepúsculo‘. El día de su boda el vestido que lleva es de Carolina Herrera pero los zapatos son un modelo de Manolo Blahnik. Que se han vuelto de supermoda. Ahora que se acerca el mes de las bodas, a las tiendas acuden novias para encargar el modelo de Bella Swan que cuestan 1.200 euros.

En España tenemos dos tiendas propias, una en Madrid y la otra, que abrió en junio del año pasado, en Barcelona.  Me contaba Mercedes, la encargada de la tienda que está en el hall del Hotel Mandarin Oriental, que hay mujeres que entran en la tienda sólo para fotografiarse rodeadas de ‘manolos’ y que hay adolescentes que se ponen a chillar como locas delante de algunos modelos, como si estuvieran en un concierto de Justin Bieber…

Pues sí, con el tiempo, Blahnik se ha convertido en un mito viviente y por eso se puede permitir el lujo de ser el único diseñador de moda en hacer tan sólo una colección al año. Pero además, en sus tiendas siguen manteniendo los modelos clásicos por expreso deseo de sus clientas, como son los Sedaraby o los salones de 5 cms, 8 cms y 11 cms, con los de esta nueva temporada 2012.

En esta edición 2012, el canario tiene varias inspiraciones: Olímpico con motivo de los Juegos de Londres, con un taconazo con 6 bolas  que son como los aros de las Olimpiadas. También está el pintor Henri Matisse como fuente de inspiración y sus contrastes de colores o la botánica, con unos modelos con hojas que parecen un jardín británico.

La verdad es que algunas sandalias son una preciosidad. La pena es que son bastante caras y que son pocas las mujeres que pueden permitirse el lujo de comprarse unos ‘manolos’. Y yo, como no tengo un Marichalar en mi vida, seguiré soñando y haciendo como decía mi madre: ‘se mira y no se toca’… ¡Qué le vamos a hacer!

Zapatos Manolo Blahnik. Precio: A partir de 500 euros.

www.manoloblahnik.com

Madrid: C/ Serrano, 58. Tel. 91 575 9648

Barcelona: Hotel Mandarin Oriental. Pº de Gracia, 38-40. Tel. 93 487 91 31.