Mujer depilándose las cejas

Un buen diseño de cejas puede ayudarte a mejorar la expresividad de tu mirada. Pero en estos tiempos de crisis, en los que mucha gente no puede gastarse un dinero en algo tan prescindible como un diseño de cejas, puedes decidirte a mejorar el aspecto de tus cejas en casa. Sólo necesitas unas buenas herramientas y un sencillo plan de actuación. La experta Mónica Pujadas, Beauty Sales Manager de Tweezerman, las pinzas que se fabrican una a una, nos contó cómo, en un taller de cejas al que asistí la semana pasada.

Espejo de aumento con luz de Tweezerman

Primero tienes que tener unas buenas pinzas que arranquen el pelo y no lo corten y que debes limpiar con un algodón con alcohol cada vez que las utilices; un espejo de aumento, imprescindible para que el acabado sea perfecto, si tiene luz, todavía mejor; y unas tijeras específicas para recortar el pelo.

Lo siguiente es reconocer tu tipo de rostro para dar forma a las cejas de una u otra manera. En función de esto debes seguir unas pautas, porque aunque las cejas bien pobladas y con personalidad hayan recuperado el protagonismo perdido, puede que no sean las más adecuadas para la forma de tu cara.

Rostro redondo: debes buscar que tus cejas estilicen el óvalo facial y le den más altura. Para ello lo ideal son unas cejas ascendentes, un ángulo alto. Evita una ceja plana.

Rostro alargado: buscamos acortar la cara y que se vea más ovalada, por eso las cejas rectas y horizontales son las más idóneas.

Dibujo de los cinco tipos de rostro

Rostro ovalado: si tienes este tipo de cara, estás de suerte porque le favorecen todo tipo de cejas, ¡enhorabuena! Pero como lo que buscamos es el equilibrio, lo mejor es que optes por unas cejas con un ángulo suave.

Rostro cuadrado: aquí se busca romper la monotonía de los rasgos, levantar la mirada y relajar las mandíbulas excesivamente marcadas, por eso, la mejor opción son las cejas en triángulo.

Rosto en forma de corazón: unas cejas delgadas, cortas, suavemente redondeadas y un poco depiladas hacia los extremos hacen que a la vista, la frente parezca más corta y la barbilla más estrecha.

Una vez tengas esto claro, debes saber que sea cual sea la forma que le vas a dar, hay tres puntos fundamentales: dónde debe empezar, dónde debe ir el punto más alto -en el caso de las caras alargadas no lo necesitarás- y dónde acaba. Para ello coge un lápiz, colócalo junto a la aleta de la nariz y sigue en línea recta, pasando por el lagrimal del ojo hasta el nacimiento de la ceja, de ahí debe partir, todo lo que quede al otro lado, debe ir fuera. Para saber dónde marcar el punto de inflexión, el más alto del arco de la ceja, coloca el lápiz haciendo una línea desde el lateral de la nariz, hasta la parte más externa del iris cuando se mira de frente. Por último, une el lápiz desde el lateral de la aleta de la nariz, con el extremo del ojo, ahí tiene que terminar la ceja.

Cómo medir los tres puntos de las cejas
Por último, dos trucos más. Si tienes el rostro pequeño, lo mejor es que optes por unas cejas finas y poco pobladas que no resten protagonismo a la mirada. También tienes que tener en cuenta que si tienes los ojos muy juntos, puedes provocar el efecto contrario incidiendo más en la depilación del entrecejo para que, ópticamente, parezca que los tienes más separados.

¿Te atreves con el diseño de cejas en casa?

Precio espejo Tweezerman con luz: 18,20 euros.
Precio pinzas Tweezerman: 22 euros.