Puede que no te haya tocado la lotería y también puede que no tengas en tu casa un lingote de oro puro como Díaz Ferrán, ni un millón de euros en tu cuenta bancaria, creo que será lo más probable. Pero una cosa es que no lo tengas y otra muy diferente es que tu mayor sueño sea tan cegador como el resplandor de un tesoro. En momentos de crisis, el poder del oro se manifiesta más esplendoroso si cabe. En la repisa de tu cuarto puedes tener un lingote ficticio con el aroma del poder: 1 Million o Lady Million de Paco Rabanne apuestan por esa lluvia de oro.
El dinero y el sexo o la seducción del amor son los deseos más intensos que tenemos y seguimos teniendo desde que el mundo empezó a civilizarse. Y no, no hemos desaparecido y tampoco hemos cambiado en nuestro afán por rendir culto al oro.
La pregunta del millón para Goldfinger es: ¿si pudieras hacer un chasquido con los dedos y pedir un deseo como el guapo Playboy protagonista de este spot, (el modelo Matt Gordon) qué pedirías? ¿Un cheque para liquidar la hipoteca? Quizá la paz en el mundo, un deseo clásico en plan Miss candidata a cualquier concurso de belleza que se precie.
Dicen que empieza una nueva era, más mística y espiritual. Pero la realidad de nuestros sueños se manifiesta en los perfumes como tótems de culto de nuestros días, simbolizando esa carga aspiracional llena del atractivo que escupen las encuestas del marketing previo a cualquier lanzamiento de fragancias. En esencia nos sigue tentando la seducción y la conquista del tesoro. El mensaje no es subliminal, el éxito material más reluciente ha entrado en escena de manera contante y sonante: money, money, oro, diamantes, coches deportivos en compañía de la chica perfecta.
Aspirando, respirando, oliendo y viendo el mensaje de la película de la nueva fragancia masculina de Paco Rabanne ( diseñador que también profetizó en su día la desaparición del mundo inspirado por Nostradamus) la historia continúa con 1 Million cargadito de su propia esencia, esta vez con más intensidad que nunca en su versión concentrada y persiguiendo más éxitos.
El famoso lingote del diseñador Noé Duchaufour Laurance contiene un nuevo caldo que sintoniza con la pirámide olfativa del primer 1 Million lanzado en 2008. Un perfume masculino ganador que se sigue vendiendo como churros, cada 5 minutos se vende uno en algún punto del planeta. Hay mucho deseo de tener oro y más oro, hasta el paroxismo. Su aroma es magnífico, un masculino tan rico y especial que podría entrar en la categoría de perfumes sin sexo. Me gusta su aroma, pero el concepto me espamta.
Precio: 81,50 euros. Lanzamiento: febrero 2013
La película de 1 Million Intense sigue teniendo como protagonistas a Dree Hemingway bañada en oro, Matt Gordon y el metal más dorado del mundo que también protagoniza otras fragancias como J´adore de Dior o L´Or de Torrente. El spot ha sido realizado por Paul Gore con fotografía de Nathaniel Goldberg. El mensaje es un mensaje ya anunciado en la primera campaña y que también se repite en otros anuncios. Milloniza tu tocador con productos aspiracionales, aunque sea una máscara de pestañas que millonice tus guiños con el dulce parpadeo de una máquina registradora, como la última de L´Oréal Paris: Volumen Millón de Pestañas, que duplica tus pestañas como si fueran billetes.
Del maquillaje del millón a las esencias de la nueva pirámide olfativa. Os cuento un secreto: en la próxima entrega de 1 Million, los dos protagonistas harán una batalla de chasquidos y la versión se presume ligera. Después de Intense, lo siguiente será la versión Eau con un aroma más fresco y liviano.
Como ya viene siendo habitual, cuando un perfume tiene éxito, luego se duplica en la versión intensa concentrada y después en otra más suave, permaneciendo el original como el rey sol alumbrando sus dos réplicas. Ejemplos recientes: Aqua di Gio y Gioia de Giorgio Armani, que también han lanzado su correspondiente Essenza o Mon Jasmin Noir de Bulgari y su versión L´Elixir.
¡Viva la intensidad del Eau de Parfum y el frescor del Eau de Toilette!
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Actor Vasile Butnaru 
Beatriz Peña 
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