De entre todas las semillas con las que nos deleita nuestra madre naturaleza, el sésamo se convierte en un fantástico compañero de viaje otoñal para vencer cansancios y desánimos. Semillas de energía que además mejoran la memoria y el rendimiento intelectual. Te cuento más secretos de este alimento que también se conoce con el simpático nombre de ajonjolí y algunas recetas para degustarlo.

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Pequeñito pero matón. A pesar de su reducido tamaño, el sésamo atesora en su interior extraordinarios beneficios para la salud. Es rico en hierro, calcio, zinc, ácidos grasos esenciales omega 3, vitaminas B y E, fibraPreviene la anemia, la osteoporosis o los problemas cutáneos. Y su alto contenido en grasas buenas y lecitina contribuyen a reducir los niveles de colesterol.

Pero sus nutritivas garras van mucho más allá, el sésamo contiene fosfolípidos y lecticina, dos componentes que  refuerzan la mente, mejoran la memoria y ayudan al rendimiento intelectual.

Las formas de comerlo son tantas como tu talento cocinillas te permita, por supuesto en aceite, pero hoy quiero darte recetas para tomarlo en semillas.

– A mí me pirra añadirlo a ensaladas y salteados de verduras. También es un sustituto fantástico de la harina en fritos y rebozados.

Convertido en mantequilla se ha puesto de moda porque es, junto a los garbanzos, el ingrediente fundamental del hummus. Si quieres hacer el famoso tahin en casa sólo tienes que lavar y remojar ½ kilo de sésamo sin tostar en agua tibia durante tres horas, luego se cuela sin descartar el agua. A continuación se tritura al tiempo que se va agregando el agua de remojo hasta obtener una pasta homogénea.

– Por las noches le añado una cucharadita a mi yogurt.

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– Y si hoy te has levantado repostera, puedes animar el intelecto familiar con unas galletas de sésamo. Necesitas: 375 gramos de harina, sal, 1 huevo, semillas de sésamo, 125 gramos de azúcar, 125 gramos de mantequilla y levadura. Mezcla la harina, la levadura y la sal. Después se añade la mantequilla lentamente y el huevo. Por último incorpora el azúcar y remueve hasta conseguir una masa homogénea. Después deja reposar unos minutos y empieza a hacer las galletas. Echa semillas de sésamo por encima. Hornea durante 15 minutos a 180 grados.