Seguro que alguno de nuestros imprescindibles de verano también te resulta impepinable.
Es verano, Bellezas Puras. Lo digo por si no lo habíais notado, por si os queda alguna duda sobre qué significa ‘canícula’ o sobre la alarma de la señora del tiempo cuando ve el mapa de la Península al rojo vivo. ¡Esto está que arde!
Las ardientes, y sin embargo templadas redactoras de ésta, vuestra santa casa, hemos recopilado nuestros imprescindibles beauty veraniegos. Todo aquello que nos llevaríamos a una isla desierta sin añadir un disco de algodón más. Lo esencial. Lo survivalista. Lo que tiene vocación universal y bien te puede servir a ti también para sobreponerte a esta estación locatis sin que se te salga un pelo de sitio. En fin, lo que finalmente queda después de cribar objetos superfluos desde la perspectiva de gente muy fogueada en belleza y sus siempre procelosos adminículos. Ficha al canto, seguro que en alguno coincidimos.
Beatriz Peña. Veterana beauty desde tiempos inmemoriales (un decir) y lideresa nata.
“En mi neceser de verano nunca falta mi spray de agua termal de Avène que me acompaña todo el año y también en verano. Es mi oasis refrescante portátil para cara, cuello y escote… También necesito cerca una fragancia que apague mi sed y siempre llevo cerca Neroli Portofino de Tom Ford, el Eau d´Hadrien de Annick Goutal, Scala Portofino de Dior o cualquier agua fresca y cítrica. Para la cara un serum concentrado de ácido hialurónico y ampollas de vitamina C + una protección solar ecológica con filtros minerales. Luego está el khôl y varios labiales en diferentes texturas. Un body oil vegetal y para el cabello: otro aceite que lo deje suave y al margen del salitre de mar, también un champú hidratante after sun y muchas mascarillas capilares, ahora estoy probando la Mascarilla de Sésamo de Source y me gusta muchísimo. Feliz verano a todas con o sin el neceser completo”.
Bea Joyce. La alegría de la casa.
“Mi producto imprescindible del verano es la hidratante facial con SPF50 de Amapola Biocosmetics. Con protección solar mineral muy alta y una formula tan limpia que se puede comer, combina las propiedades hidratantes del aceite de argán y de buriti con la manteca de Karité para mimar hasta las pieles más sensibles y deshidratadas. El auténtico dos en uno, es perfecto para llevar de viaje porque tiene el tamaño aceptado en los aeropuertos y su fórmula te garantiza que no estarás matando corales ni pececitos si te banas con este producto. Cosmética bio de pata negra made in Spain.
Lali Sacristán. Siempre muy interesante.
“Imprescindibles para mí:
– Pinzas de depilar y espejo de aumento. Genial el de Beter de 10 aumentos (¡¡se ve hasta lo que no hay!!)
– Bálsamo labial Carmex. Me gusta en barra y el que no tiene sabor, con un SPF 15.
– Agua termal Avéne, que la tengo en la nevera.
– Crema de pinrel, muy buena la de Margaret Dabbs.
– Un gel de aloe vera”.
Malva Rico. Mujer precavida.
“ –Skin Food Weleda. Vale para todo, es reparador, cicatrizante… Lo utilizo cuando tengo los labios secos, a modo de mascarilla nocturna si tengo la piel de la cara especialmente necesitada de hidratación, y hasta como iluminador en la cara.
– Aceite de árbol de té The Body Shop. Picaduras, granitos inoportunos, rojeces, irritaciones, anti-piojos…, lo llevo siempre en el neceser de viaje porque siempre hace falta.
– Sunissime Sérum Reparador SOS Anti-Edad Global de Lierac, un sérum fantástico para reparar la piel del sol, al mismo tiempo que hidrata y deja la piel muy fresca. Lo utilizo mañana y noche.
– L’Huile de Leonor Greyl. El aceite prelavado de Leonor Greyl es un básico en mi bolsa de viaje. Lo aplico durante el día para proteger el pelo del sol, la salitre o el cloro y al volver de la playa me lavo el pelo y queda espectacular. Si tengo la melena especialmente estropeada, lo aplico de medios a puntas por la noche y lo lavo a la mañana siguiente.
– Eucerin pH5 Loción Hidratante Ultraligera. Una hidratación intensa pero muy ligera perfecta para el verano y que también repara después de la exposición solar.
– Lorenzo Villoresi Acqua di Colonia, es el perfume perfecto para el verano, la frescura más evocadora de un agua de colonia, pero con el sello indiscutible de Lorenzo Villoresi.”
Towanda. Oriunda de Freskal-Herria.
“En verano me gusta pasar un poco de todo y que me invada la sensación de libertad. A veces hasta me encuentro con mi propio olor y no me pongo perfume, fijaos lo que os digo. En lo que a belleza se refiere, este año estoy encontrando un placer rayano en lo morboso en no pintarme las uñas, por ejemplo, o en no maquillarme más que los labios, que es lo único realmente imprescindible para mí, me da buena cara al instante. Uso la barra mate roja, rojísima, de LOLA Make Up porque no me la arrebata ni la ola más surfera (sí, yo bajo a la playa con el morro pintado: una es libre pero también grande). Para cubrir brillos, y en esas raras ocasiones en las que me apetece ir maquillada, uso la base de maquillaje mineral Beauty Me de Alice in Beautyland. Gracias a sus piedras preciosas, me ilumina la piel mientras mitiga todos esos brillos que despierta el calor… Y además tiene SPF20. El básico más básico es la protección solar. Para el rostro uso Daily Defense de Zelens y para el cuerpo, el aceite SPF50 de Avéne, que además deja una piel satinada divina. Tengo el pelo muy seco y el verano me lo deja como un auténtico estropajo. Siempre necesito una buena cataplasma nutritiva, y en este sentido encuentro fantástico L´Huile de Leonor Greyl. Me lo aplico generosamente y duermo con él cada dos o tres noches para ir reparando daños. Con la limpiadora Rose Diamond de The Organic Pharmacy, con enzimas de papaya que exfolian la piel con suavidad, terminaría mi neceser de imprescindibles de verano. ¡Ah! Y horquillas, al menos dos, para recogerme el flequillo, rizado en caracoles por no haberme pasado la plancha”.