¿Sabes qué alimentos son amigos de tu salud dental y cuáles no? Te animamos a que vayas a comprar sabiendo qué te conviene.
La salud entra por la boca y la enfermedad, también. Por eso, no está de más saber qué alimentos nos convienen para ayudar a nuestro organismo a estar y sentirse bien, además de las rutinas habituales de limpiarnos bien los dientes, visitar, al menos una vez al año, al odontólogo y no hacer el bestia con nuestros piños, que son los únicos que tenemos y cambiarlos cuesta un dineral.
Los dentistas no sólo se ocupan de sacarte una muela, hacerte un empaste o ponerte un implante. También nos aconsejan qué tenemos que comer para conseguir una dentadura más fuerte y más sana.
El doctor Iván Malagón, una referencia en cuanto a cuidado dental, nos abre la enciclopedia de los alimentos buenos y malos para nuestra salud dental.
Las frutas y las verduras son amigos para siempre y nuestros aliados, sobre todo la manzana, las uvas o las fresas.
Las manzanas, junto con la pera, la sandía o el kiwi ayudan a limpiar la superficie de dientes y encías.
Las uvas y los limones consiguen una sonrisa más blanca ya que tienen un efecto blanqueador natural.
Las fresas contienen xylitol, que ataca directamente a las bacterias de la placa dental y evitan la desmineralización de la dentadura.
Los vegetales crujientes, como la zanahoria o el rábano, ayudan a retirar de los dientes los restos de otras comidas que ocasionan manchas y limpian la placa bacteriana.
El apio no puede faltar si quieres combatir la halitosis, ya que ayuda a combatir el mal aliento.
Los alimentos ricos en fósforo, como los huevos, el pescado, las legumbres, las nueces o los calabacines son esenciales para la estructura de los dientes. No te olvides de apuntarlos en la lista de la compra.
El yogur, la leche y el queso limpian los dientes y combaten el mal aliento gracias al ácido láctico que contribuye a la segregación de la saliva; además el calcio ayuda a mejorar nuestra salud dental.
Si optas para desayunar por el té verde o te tomas uno después de la comida estarás ayudando a tu salud dental porque mantienes tus encías en buen estado y las proteges de la peridontitis, esa enfermedad que parece que está detrás de muchas afecciones del corazón.
Y si te quieres dar un capricho, no te cortes… Algunos alimentos que parece que son perjudiciales, como el vino tinto, la cerveza o el chocolate, consumidos con moderación, aportan grandes beneficios a nuestros dientes. Por ejemplo, el vino, muy moderado su consumo, previene las caries; el chocolate contiene teobromina, un componente que ayuda a la mineralización del esmalte reduciendo la sensibilidad dental, y la cerveza rubia provee al organismo de nutrientes esenciales para fortalecer la dentadura. Además, el lúpulo que contiene ayuda a combatir las bacterias y hongos que dañan la boca.
Da sabor a la vida y a las comidas con algunos condimentos que, además de darles alegría son saludables. En esta cesta de la compra incluimos el perejil, la albahaca y la menta que contrarrestan el efecto del ajo y de la cebolla, y el jengibre que, consumido en pequeñas cantidades, neutralizan el mal olor.
Y ahora, ¿cuáles son los mayores enemigos de tu salud dental? Los zumos de cítricos, aunque te pese, porque nos gustan mucho, pero la exposición a los ácidos que contienen puede acabar dañando el esmalte provocando mayor sensibilidad dental y más caries. Las bebidas carbonatadas también son una bestia negra para nuestra boca porque desmineralizan el esmalte. Los azúcares (qué obviedad, ¿no? Pues hay que decirlo más veces) producen caries; cuantos menos tomes, mejor.
En el desayuno no abuses del café, que tiñe el esmalte al igual que lo hacen el ketchup, la salsa de soja, el vinagre balsámico y el vino tinto, que ya hemos dicho más arriba que pueden ser recomendable para prevenir las caries pero también manchan los dientes.
La cebolla y el ajo producen mal aliento; si los tomas, contrarresta el efectos con especias como el perejil, la albahaca o la menta.
Los encurtidos son unos alimentos con muchos fans pero… su nivel de acidez y sal que potencian su sabor es corrosivo para los dientes.
Y la fibra, tan necesaria, es un arma de doble filo: por un lado mantiene nuestra flora intestinal en perfecto equilibrio aunque si se consume en exceso se pueden producir bloqueos en la absorción del calcio, elemento imprescindible para unos huesos y dientes fuertes.
¿Qué te ha parecido la lista de la compra de Belleza Pura?