Los milagros no existen. Pero sí algunas estrategias para subir un poco el volumen de un pelo fino. Música para nuestros oídos.

El pelo fino, quebradizo, opaco y débil (cómo me ensaño) es la pesadilla de muchísimas mujeres. Entre las que me encuentro.

Tener una melena XXL es una dorada Arcadia que sé que jamás alcanzaré. Pero sí es posible ganar algo de terreno en esta carrera capilar incorporando algunos consejos de cuidado específicos para la naturaleza finolis. Nos ayuda con ello Paul Tudor, estilista y responsable del salón David Künzle.

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Salón David Künzle de la calle Fuencarral

1. Corte y confección
Cada tipo de pelo requiere su corte. Es realmente sorprendente lo que puede cambiar el conjunto de la melena cuando el corte se adapta al grosor, onda y ‘calidad’ del cabello. Para pelos finos, “lo mejor son las capas, que darán más cuerpo y, por tanto, más volumen. La forma recta y cuadrada en la parte de abajo da un efecto de tener más cantidad”, cuenta Paul Tudor.

2. Lavado, el paso esencial
Como en la piel, se vuelve imprescindible la limpieza con un producto específico para esta tipología. El pelo se ha de desenredar en seco para evitar que se rompa, y es preferible aclarar con agua templada, que seca menos que la caliente.

3. También en seco
“El champú en seco es el gran aliado de los cabellos finos. Masajearlo suavemente con los dedos hará que adquiera más cuerpo y consistencia en la raíz”, desvela el estilista de David Künzle.

4. Orgía capilar
Cómo nos gusta que nos toqueteen. ¿Verdad? Pues hale, a masajearte el cuero cabelludo con tus buenas manos, o a pedir sopitas a quien te parezca oportuno. “El masaje estimula los folículos pilosos y el crecimiento del cabello. Eso sí, debe ser suave para activar la circulación de los más perezosos”.

5. El color ayuda. Y mucho
El color contribuye a crear un efecto visual de mayor cantidad gracias al juego con las mechas y reflejos. Es uno de los trucos que más se notan, y aunque no haya más pelo, lo cierto es que reconforta. “Si aclaras las puntas ligeramente”, aclara Tudor, “conseguirás un efecto de densidad en el cabello. En cambio, si combinas reflejos oscuros y claros crearás la sensación de movimiento y luminosidad”.

6. ¿Harta del pelo fino? Ponte extensiones
Ojo, harta no es lo mismo que desesperada. Eso sí, no olvides que se trata de un recurso muy gratificante, pero que en algún momento te tendrás que quitar. Para ello se inventaron las extensiones de clip, que no solo no dañan la materia prima, sino que puedes retirar cuando buenamente te canses de ellas. El pelo fino tampoco es un problema. Aprende a sacarle partido a lo que tienes, ¡y listo!

David Künzle

Ponzano, 42 (Madrid).

Fuencarral, 144 (Madrid).