Usar los tintes de pelo en casa y que te quede estupendo ya no es ningún problema. Hay decenas de colores, tipos de coloración y marcas. Y todas al alcance de tu mano y de tu bolsillo.

Nunca como ahora se han utilizado tanto los tintes para el cabello en casa. Durante la pandemia, la compra de productos para el cuidado del cabello aumentó y, sobre todo, los de coloración capilar, que se dispararon hasta un 98%.

Durante años la ventas de tintes había caído porque las mujeres preferíamos ir a la peluquería a teñirnos. Sin embargo, en cuanto asomó la nariz la Covid-19 y se cerró todo a cal y canto, las mujeres decidimos ponernos manos a la obra y teñir nuestro cabello.

Carta Color Inoa Loreal

Teñir el pelo parece fácil, pero tiene sus trucos. Lo más importante es elegir bien. Los tintes de pelo, que ahora mismo están a la venta son, por lo general, muy buenos. Todos están avalados por grandes marcas que no se van a jugar su prestigio ofreciéndote cualquier cosa. Ahí puedes estar tranquila.

Ten en cuenta que los tintes han evolucionado mucho. Y se han desarrollado de esta manera porque las mujeres hemos querido estar siempre perfectas.

Óxidos, oro, henna o azafrán: todo valía para cambiar el tono del cabello

Cleopatra

Desde los neandertales, que usaban pigmentos para cambiarse el color del pelo hasta ahora, que podemos adquirirlos en la tienda de peluquería especializada de cualquier barrio, ha llovido mucho. En el Paleolítico, el óxido de hierro que se encontraba en el suelo lo empleaban sus pobladores para teñir de rojo sus cabellos y su cuerpo con fines estéticos y para ciertos rituales; era ese mismo óxido de hierro el que utilizaban para pintar en las cuevas.

Griegos, romanos y egipcios dieron un vuelco a la coloración capilar. Los griegos usaban un extracto de henna e incluso azafrán. De hecho la henna se sigue utilizando.

Las mujeres de la Roma antigua cambiaban el color de sus cabellos, para parecerse a sus esclavas galas, con una pasta con cenizas de madera de haya y sebo de cabra.

Por si fuera poco, elaboraron un tinte permanente negro a base de plomo. Claro que funcionaba aunque, desgraciadamente, no tenían en aquella época los conocimientos avanzados en química como para saber que el plomo era tóxico. 

Cuando se dieron cuenta, cambiaron de método y obtenían el tinte negro fermentando sanguijuelas en vasijas revestidas de plomo. ¡Cómo ha cambiado el mundo!

Los egipcios iban aún más allá y se rapaban la cabeza. Con ese cabello hacían pelucas que teñían y perfumaban y se ponían sobre la cabeza para protegerse de los rayos solares.

Rubios al poder

Marilyn Monroe

¿Qué tendrá el tono rubio que tanto se pone de moda? Anita Loos, escritora estadounidense, se dio a conocer en 1926 con el libro Los caballeros las prefieren rubias, aunque por alguna razón rectificó en otro con el título Pero se casan con las morenas. ¿Es más sexi ser o parecer rubia?

Eso debieron pensar durante el barroco cuando fabricaban pelucas empolvadas con tonalidades rosas, amarillos e incluso azules. Hasta lejía usaban as mujeres nobles venecianas para decolorar sus cabellos. Se impregnaban el pelo de lejía o sosa cáustica y se ponían al sol. Afortunadamente, hoy no tenemos que sufrir tanto, y puedes comprar un buen tinte que no te destroce el cabello en multitud de tiendas. 

Un remedio contra la malaria acabó en el descubrimiento del primer tinte sintético

Color Púrpura

Imagen: Freepik 

Un gran avance fue el descubrimiento del primer tinte sintético para la industria textil, que se debió a un “error” del químico británico William Henry Perkin en 1863. Perkin, considerado como el padre de la industria química al desarrollar colorantes artificiales, buscaba una cura para la malaria y pensó que con la oxidación de la anilina podría lograr quinina. Evidentemente estaba equivocado y lo que consiguió fue una especie de alquitrán oscuro que coloreaba de un tono púrpura todo lo que tocaba. Su malveína, también conocida como malva o púrpura de Perkin revolucionó la industria textil y fue el primer paso para llegar hasta los tintes para el cabello.

Auréole, el primer tinte para el cabello 

Schueller

Pasaron bastantes años desde aquel primer tinte sintético para tejidos hasta la fórmula innovadora del emprendedor Eugene Schueller, fundador de L’Oreal, que creó en la cocina de su casa los primeros tintes para cabello en el año 1907. Su fórmula, llamado Aurèale, la iba vendiendo en las peluquerías locales.

Así creó su primera empresa dos años después bajo el nombre de Société des Tintures Inoffensives pour Chevaux (Sociedad Francesa de Tinturas Inofensivas para el Cabello) que luego se llamaría L’Oreal.

Schwarzkopf y su primera coloración casera

1898 Drogerie

Hasta 40 años después de aquel hito no se crearía el primer sistema de coloración casera. Se lo debemos al químico alemán Hans Schwarzkopf , en cuya droguería de Berlín comenzó a desarrollar su trabajo con los primeros champús, las lacas y sus tintes caseros. En los años 50 aparecen los sprays de coloración instantánea.

Desde mediados del siglo pasado hasta ahora, la química de los laboratorios han logrado eliminar los componentes dañinos de los tintes haciéndolos mucho más seguros.

En el siglo XXI la coloración capilar ya no se usan únicamente para eliminar las canas, que también los utilizan para ello millones de mujeres, sino como un medio de expresión y de búsqueda de tendencias de moda.

¿Por qué nos coloreamos el cabello?

Coloracion Cabello

Imagen: Марина Химич. Pixabay

Nueve de cada 10 mujeres de cambian de color el pelo. ¿Por qué? Cada edad tiene sus motivos. Desde hace unos años las chicas más jovencitas ya tiñen sus melenas, algo impensable hace 20 o 30 años. Ellas quieren verse diferentes a las demás, desean ser únicas, y cambiar el tono de su cabello es una manera fácil de mostrarse distinta.

A partir de los 30 años, la tarea de teñirse el cabello es más una idea premeditada: buscan romper con su imagen anterior y nada más sencillo que darse un tinte.

Cuando la mujer entra ya en los 40 aparecen las primeras canas y para muchas mujeres es casi una obligación teñirse el pelo porque creen que las canas les echan años encima. Con el cambio de color vuelven a sentirse jóvenes. Esta tendencia está cambiando y ya son muchas las que se dejan el pelo blanco o incluso se tiñen de color blanco porque se está poniendo de moda.

Sea como sea, los tintes son una opción muy válida y a precios muy competitivos.

Lo único que hay que saber es qué tipo de tinte quieres aplicarte porque hay muchos y qué color buscas.

¿Quieres cambiar de color o buscar cubrir tus canas?

Tinte

Imagen: Cottonbro. Pexels

Si ya te has decidido a cambiar de color en tu propia casa primero debes contestarte a algunas preguntas: ¿quiero que el color me dure mucho tiempo o poco? ¿busco un cambio de color radical o sólo bajar o subir un par de tonos? ¿quiero que desaparezcan mis canas?

¿Has contestado a estas preguntas? Entonces estás dispuesta para conocer qué tipos de tintes puedes encontrar en el mercado según su duración.

  • Permanentes: Si lo que quieres es cambiarlo del todo o quieres cubrir bien tus canas, aunque como contrapartida debes saber que el efecto raíz es el problema. Según vaya creciendo tu pelo necesitarás volver a aplicarte el tinte, aunque sea sólo ahí, en el nacimiento del cabello.
  • Semipermanentes: Si no se te notan mucho las canas y no buscas un cambio total, un tinte semipermanente es el ideal; con él acentuarás el tono o matizarás el que ya tienes. Resisten unos 4 lavados.
  • Temporales: Cuando lo que quieres es cambiar de color para corregir tu tono elige uno de estos. El colorante de estos tintes se deposita en la cutícula del cabello pero no penetra, así se elimina en 4 lavados y no cubre las canas. En las tiendas se venden como espuma, loción o champú colorante.

Otra pregunta más que tienes que hacerte: ¿qué quiero aplicarme en el pelo, un tinte natural o un sintético?

  • Algunos tintes contienen unas sustancias naturales con propiedades tintóreas, como la henna, el castaño o el nogal. La variedad de colores es menor que en los sintéticos y su aplicación suele ser más lenta.
  • La coloración sintética, la que posee cualquiera de las marcas que encuentras en el mercado, como L’Oreal, Schwarzkopf, Wella, Montibello…, es la que dura más tiempo, en una hora has acabado aunque es algo más agresiva con el cabello.

Estas coloraciones contienen compuestos químicos que reaccionan entre sí para cambiar el color de tu cabello, como los PPD o parafenilendiamina. Los PPD son los ingredientes principales de los tintes porque reproducen un color natural que no se va con los lavados. Es quizá el componente que puede ocasionar más alergias; por eso es necesario hacer una prueba en el dorso de la muñeca o detrás de las orejas y esperar un par de días hasta comprobar que es seguro.

Otros compuestos químicos que contienen los tintes son el peróxido de hidrógeno o agua oxigenada, la base oxidativa que se aplica sobre el cabello para que reaccionen los demás componentes, y el amoniaco, que se emplea para abrir la cutícula y facilitar la coloración.

¿Los tintes son seguros?

Beautiful Young Woman Coloring Her Hair And Looking At Clock Isolated On White

Imagen: Freepik

Absolutamente. Todas las coloraciones de cabello que se comercializan en España y en los países de la Unión Europea son fiables. Otra cosa muy diferente es que te puedan producir alergia, que nada tiene que ver con la seguridad.

Por eso, es importantísimo seguir los pasos del fabricante.

La prueba de alergia es fundamental. Una vez que hayas comprobado que no tienes ninguna mala reacción, organiza todo para que luego no te pille desprevenida. Ten a mano una toalla usada (más que nada para no estropear una nueva) por si la necesitas y prepara el tinte con tranquilidad y respetando las medidas del fabricante.

Es mejor que te tiñas un día que no te laves el pelo porque va a agarrar mejor el color.

Conviene que te pongas un poco de vaselina alrededor de la cara, orejas y cuello para que no se te manche la piel. Utiliza guantes para evitar que se te tiznen las manos.

Busca bien el tono. En la carta de colores suelen aparecer más oscuros de lo que son en realidad. Coge uno más claro; así no te llevas a engaños.

Parte el pelo en rayas para que no quede ninguna zona sin cubrir de tinte. Es un poco trabajoso, sí, pero luego, verás qué bien te queda.

Guarda estrictamente el tiempo de reposo que diga el fabricante. Una vez que haya transcurrido el tiempo, enjuaga muy bien el cabello hasta que el agua salga clara y lávalo con un buen champú y una buena mascarilla. Si lo mimas, notarás tu melena más suave y luminosa.

Beauty Fashion Model Girl With Olorful Dyed Hair Girl With Blue Makeup Hairstyle Blue Makeup Studio

Imagen: Valuavitaly. Freepik

Y no te olvides de las chispas de color; esos espráis de mil y un colores que puedes ponerte cuando desees cambiar el color de tu melena para alguna fiesta o quieres sorprender a alguien.  Ahí tienes esa opción en tienes un montón de tonalidades: azules, rosas, verdes, amarillos, naranjas... y con la ventaja de que se eliminan en un sólo lavado.

¿Estás ya preparada para utilizar tu tinte en casa?