Las técnicas de lifting del segundo milenio se realizan mediante tecnologías que permiten abordar la flacidez de forma sumamente eficaz. Quien pida un lifting como regalo de Navidad puede estar seguro de contar con buenas opciones donde elegir.
Hace un tiempecito que hombres, mujeres y viceversa no piden un abrigo de pieles o un viaje a Tailandia como regalo de Navidad, sino un lifting para sujetar el andamiaje del ‘careto’ y embriagarse ante su renovado aspecto.
“Queridos Reyes Magos, este año he sido muy ‘buene’, y lo que más me gustaría en la vida es revertir el paso del tiempo con la ayuda de un lifting”. Regalar o regalarse belleza es regalarse bienestar a través de la satisfacción de verse bien. Si tu carta a Sus Majestades tiene este encabezado, vente en torno al árbol, que te cuento.
Ultherapy es la joya de la corona en materia de lifting no invasivo, y podría ser un regalo de Navidad altamente demandado. De hecho, es el único tratamiento en su línea aprobado por la FDA y acumula no menos de 50 estudios sobre su eficacia.
Esta técnica se basa en ultrasonidos focalizados y actúa en las capas más profundas de la piel, allí donde estimular la producción de colágeno y elastina marca la diferencia. Además de tensar la piel, redefine las facciones, favorece la eliminación de toxinas e ilumina la tez. Sin cirugías ni infiltraciones, se realiza en lo que se tarda en leer un artículo de Jot Down y te vas a tu casa por tu propio pie sin tener que ocultar tu procesado rostro porque no se nota nada extraño a simple vista.
El tratamiento se realiza con un manípulo, que dirige los ultrasonidos a las zonas diana gracias a la visualización ecográfica de los movimientos manuales. Así, quien te realiza el tratamiento puede ver las capas de tejido en tiempo real y asegurarse de que te está aplicando la energía de manera correcta en cada área.
Se puede usar en todo el rostro o en áreas de interés como la frente y las cejas, el mentón, el óvalo, el cuello o el escote. Lo probé hace un tiempo y el resultado me pareció fabuloso. La piel se ve más firme y el tono queda muy uniforme y resplandeciente. Molesta, pero dentro del espectro de lo soportable. La duración es de un año.
Precio: en torno a 500 euros por zona en Gema Cabañero (Madrid).
Entrando en quirófano, nos encontramos con la técnica del vector natural del Doctor Martín del Yerro, cuyas principales ventajas son la naturalidad del resultado y que no precisa de anestesia general.
Esta técnica se propone devolver los tejidos a la posición que tenían hace 10 años siguiendo el mismo vector por el que cayeron con el envejecimiento. Este tipo de lifting permite una personalización 100% a medida. El resultado que se persigue es la cara que tenía la persona años atrás, evitando la clásica ‘cara de velocidad’ que puede dejar el lifting quirúrgico tradicional y permitiendo un nuevo envejecimiento acorde con la fisionomía de la persona. Esencialmente es como hacer un restart.
Este lifting dura 10 años. Quienes han pasado por el trance aseguran que la principal molestia del posoperatorio es la tirantez de la piel en la zona posterior de las orejas, donde se ajusta la tensión de la piel durante la intervención.
La Clínica del Doctor Martín del Yerro está en Paseo de la Habana, 24, Madrid.
¿Se llenarán las consultas de personas con un vale regalo de Navidad intercambiable por un lifting?
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Beatriz Peña 
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