La necesidad de exponerse al sol para sintetizar vitamina D es indiscutible. Sin embargo, la protección solar es esencial para prevenir el daño cutáneo. Este conflicto de intereses ha sido ampliamente debatido: ¿ cómo equilibrar la fotoprotección con la obtención de vitamina D?
Un rayo de sol me trajo tu amor, mi vitamina D y, ejem, ¿mi melanoma? De eso nada, monada: menos callo solar, más sombra y la dosis de sol justa y necesaria en las mejores horas del día.
El dilema del fotoprotector
Según la Academia Española de Dermatología y Venereología, bastan 15 minutos diarios de exposición solar, preferiblemente en brazos o piernas, para sintetizar la vitamina D necesaria. Es recomendable evitar exponer el rostro, debido a su mayor propensión al envejecimiento y al cáncer de piel. Pero surge una pregunta crucial: ¿con o sin protección solar?
Existe la creencia de que para obtener vitamina D, es necesario olvidarse del fotoprotector. La lógica detrás de esto es que bloquear la radiación solar impediría la síntesis de esta ‘súper vitamina’. Sin embargo, y ojito, Madonna, que sé que me lees, investigaciones de la Skin Cancer Foundation desmienten esta teoría.
La ciencia detrás de la síntesis de vitamina D
La radiación UVB del sol interactúa con la proteína 7-DHC en la piel, convirtiéndola en vitamina D3, la forma activa de la vitamina. Aunque los protectores solares con SPF 50 filtran la mayoría de la radiación UVB, estudios demuestran que quienes usan protector solar a diario mantienen niveles adecuados de vitamina D. La luz ultravioleta daña el ADN celular de la piel y puede causar cáncer cutáneo, riesgo que se reduce significativamente con el uso de protectores solares.
El mito del ‘callo solar’
‘Yo es que me pongo morena en cuanto me da el sol. Me encanta pasar horas y horas, además’. Pues muy mal, querida. El bronceado solar no es un signo de salud, sino de daño. La producción de melanina es un mecanismo de defensa de la piel, y el llamado ‘callo solar’ no es más que un mito peligroso. La exposición prolongada al sol durante las horas centrales del día no es recomendable, incluso con protectores solares de alta graduación. Otra cosa es lagartear un poquito a primera y última hora, que disfrutando del sunset mojito o kombucha en mano. Ay.
Beneficios del sol: un equilibrio necesario
A pesar de los riesgos, el sol tiene beneficios innegables. La exposición moderada ayuda a nuestro cuerpo a producir vitamina D, esencial para la salud ósea y el sistema inmunológico. Además, mejora el estado de ánimo y regula el ciclo del sueño. La clave es el equilibrio: disfrutar del sol con moderación y protección.
Estrategias para mantener niveles óptimos de vitamina D
Para aquellos preocupados por sus niveles de vitamina D, aquí hay algunas recomendaciones:
- Exposición controlada al sol: 10-15 minutos diarios son suficientes. Lo ideal es tomar el sol en los brazos o las piernas en las horas valle del día.
- Alimentación rica en vitamina D: incorpora setas, reno, aceites de hígado de pescado, queso, hígado de ternera, huevos y chocolate negro en tu dieta.
- Suplementos: en casos necesarios, los suplementos de vitamina D pueden ser una buena opción.