Raffel Pagés (1942- 2021) celebró el centenario de su firma con una cena de gala, de alta peluquería y un desfile histórico con los estilos más representativos de cada década. De esos 100 años de peluquería con el apoyo de L´Oréal Professionnel y estilismo de moda de Lola Casademunt. En esta gran noche volvió a lucir con luz propia nuestra top model Nieves Álvarez, siempre deslumbrante.
L´Oreal Professionnel y Lola Casademunt fueron los patrocinadores de este gran evento de moda para recordar a Raffel Pagés en el centenario de la firma que cuenta hoy con 65 salones de peluquería, muchos de ellos franquiciados. De todos ellos, 17 pertenecen a sus 2 hijas Carol y Quionia, junto con el Museo de Peluquería.
Sus hijas y nietas llevaban casi un año preparando esta noche tan emocionante al detalle. Allí estuve junto a la prensa de belleza y 800 invitados. Estaba también su familia profesional con sus equipos de peluqueros, políticos, influencers y las grandes marcas de peluquería que le apoyaron a lo largo de su carrera.
Más que una cena de gala, un desfile de tendencias con la peluquería a la cabeza, y por supuesto gran tarta para celebrar el centenario de Raffel Pagés
Como asistente al acontecimiento en el Museo Maritim de Barcelona puedo decir que fue una noche mágica donde flotaba el cariño y la admiración que todos los que le conocimos teníamos hacia Raffel.
Encima de todas las mesas había una Barbie peinada por los equipos de Raffel Pagés y vestida por Lola Casademunt con un vestido largo de animal print. Nos cuenta Quionia, que para peinar a las Barbies hubo que hervirlas la cabeza y el pelo primero.
Sobre el exquisito menú de la cena, una nota escrita a mano por el peluquero Raffel Pagés con las tendencias atemporales que deja para la posteridad:
- Cortes prácticos para primavera-verano
- Cortes muy femeninos
- Cortes actuales para la mujer de hoy
- Moldeados Soft para no tener que hacer otra cosa que lavarlos…y ya!
- Y si aún se quiere renovar más un peinado, Pagés aconseja una clava o transparencias para dar nuevo brillo y color.
Era un peluquero entrañable, cercano, gran defensor del sector y con una gran personalidad que transmitía en todas sus creaciones. Por supuesto hablo de Raffel Pagés hijo, aunque la firma la fundó su padre que se llamaba igual y abrió la primera peluquería hace ya 100 años, gracias a la expansión comercial que impulsó Raffel hijo. Al que tuve el placer de entrevistar en muchas ocasiones. Siempre recordaba su aventura profesional en París, junto a las (¿hermanas?) Carita, las reinas de la estética, la peluquería y el glamur allá por los años 70. Con esa formación a la francesa engrandeció su formación y la firma ganó savoir faire. Después de 100 años, la historia continúa y sus hijas continúan peinando almas como él mismo decía.
El Museo de Peluquería de Raffel Pagés también cumple aniversario, ya un cuarto de siglo de vida
Según me explicó Carolina Pagés entre risas, el tercer heredero de ´su padre era el Museo de Peluquería. Consiguió una colección de objetos relacionados con la historia de la peluquería de más de 14.000 antigüedades, empezando por el primer secador que compró su padre. Sin duda, este museo fue su gran pasión, porque pensaba que divulgando la cultura de la peluquería a lo largo de la historia revalorizaba la profesión. Así ha sido, este museo recibe visitas de alumnos en academias de peluquería y de peluqueros de todo el mundo. Está abierto a todo tipo de público y se aprenden muchas curiosidades. Tampoco quiero hacer spoiler porque la visita sorprende mucho y es impresionante ver todas las piezas que hay, entre maquinaria antigua hasta cuadros realizados con cabello. Todavía faltan algunas piezas por exponer como el cabello de John Lennon. Pero sí están los de Napoleón o María Antonieta.
Cuenta Carolina Pagés que durante unas vacaciones familiares en París entraron en una tienda de antigüedades y a Raffel Pagés se le fueron los ojos a un objeto para su museo. Al mostrar su interés por comprarlo, el anticuario le respondió que no podía vendérselo porque aún no había avisado a un peluquero de España que siempre quería todos los objetos antiguos relacionados con la peluquería. Entonces le preguntó, qué cómo se llamaba ese peluquero. El anticuario contestó: Raffel Pagés. Entonces él sacando su DNI dijo: yo soy Raffel Pagés.
Museo de historia de la peluquería Raffel Pagés
Rambla de Catalunya, 99,
08008 Barcelona
Rservar visita: +34 93 205 24 19
Horario
Lun – Vier: 9:30h – 13:30h
y de 16h – 19:30h