Sí, amigas, llega el verano y no solo trae mojitos y bronceado: también puede venir con picadura de medusa, infecciones y molestias que nos arruinan el descanso si no estamos prevenidas.

Llega el verano, ese momento del año que muchas esperamos con ansias. Sol, mar, playa, terraceo… ¡y también algún que otro imprevisto! Aquí os cuento algunas de las enfermedades más típicas de esta época para que no os pillen por sorpresa.

Picadura de medusa: ese encuentro que nadie quiere tener

Si eres de las que no perdona unos días junto al mar, seguro que ya sabes lo molestas que pueden llegar a ser las picaduras de medusa. A mí me pasó una vez y no se lo deseo a nadie. Esa mezcla de dolor, picor y escozor en la piel no es peligrosa en la mayoría de los casos, pero sí bastante incómoda. Según el doctor Daniel Sánchez, coordinador de urgencias del Hospital Vithas Aguas Vivas (Valencia), hay que tener especial cuidado si la picadura se produce en zonas sensibles como el cuello, la cara o los genitales…

Picadura Medusa En El Oceano

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¿Qué hacer si nos pica una medusa?
Lo primero, salir del agua ya. Así evitamos que nos piquen más. Después, aclarar la zona con agua de mar o suero fisiológico (nunca con agua dulce) y, si ves restos de tentáculos, retíralos con pinzas o con guantes. Ni se te ocurra hacerlo con las manos desnudas ni frotarte la zona.

Y ojo con los mitos:
No, orinar sobre la picadura no solo no ayuda, sino que puede empeorarla. También olvídate del alcohol, el amoniaco o de frotarte con arena o una toalla. Todo eso solo irrita más la piel.

En el caso de los peques

Con los niños hay que estar aún más atentas. “Son un grupo de mayor riesgo, pues en el niño, la superficie de piel afectada por una picadura es mayor que en el adulto, y la piel del niño es más fina. En casos muy raros puede producirse una reacción alérgica grave (un shock anafiláctico) y habría que acudir a urgencias.

BODEGÓN AUTAN DEFENSE

 

Picaduras de mosquito: más allá del simple picor

En verano, con las altas temperaturas, la presencia de mosquitos se incrementa. La picadura del mosquito tigre, aunque similar a la de otros mosquitos, puede ser más dolorosa y causar una reacción más visible y prolongada en la piel. Y, no hace falta viajar a un destino exótico porque su presencia se ha detectado en 156 municipios españoles. No es para asustarte pero, la picadura del mosquito tigre puede transmitir enfermedades como el dengue o el zika. No es para alarmarse, pero sí para ir preparadas. En mi neceser nunca falta un buen repelente. Uno que recomiendo es el Autan Multi-insect Spray Seco, que protege contra varios tipos de mosquitos (incluidos el tigre y los tropicales) y también contra garrapatas. Dura hasta 8 horas, así que puedes irte tranquila de excursión o de cena al aire libre. Y si ya te han picado, Autan Defense Post-Picaduras alivia bastante gracias a la camomila y el aloe vera. Yo siempre lo tengo a mano. 

Precio Autan Defense Fuerte: 10,50 euros y Autan Post-Picadura: 7.69 euros.

AUDIOLOGÍA UNIVERSITARIA OTITIS INFANTIL

Otitis del nadador

Si tenéis peques, seguro que habéis oído hablar (o sufrido) la famosa otitis del nadador. Es una infección del oído externo muy típica en verano y bastante incómoda. Los niños y bebés son los más propensos porque su conducto auditivo es más pequeño y el agua se les queda dentro más fácilmente, creando el ambiente ideal para bacterias y gérmenes.

El experto Joan Francesc Horvath, de Óptica & Audiología Universitaria, nos da estos consejos súper útiles:

1. Utiliza tapones de baño a medida, tanto en la playa como en la piscina. Se adaptan a la forma del oído y te ayudarán a prevenir la otitis.

2. No pasar demasiado tiempo en remojo ni bucear demasiado.  

3. Extraer el agua de los oídos. Para hacerlo se debe inclinar la cabeza del niño para que caiga el agua.

4. Secar bien los oídos con cuidado, utilizando la esquina de una toalla ¡sin bastoncillos!

5. Y como extra, si tu peque es propenso, ponle un gorro de piscina que cubra bien las orejas.

Así que ya sabes, disfruta del verano al máximo, pero no bajes la guardia. Un poco de prevención puede ahorrarte una visita al centro de salud y muchas molestias.