Los exfoliantes corporales de frutas son buenos, golosos y baratos. Sus aromas convierten este ritual tan primaveral de cambiar de piel en un goce para los sentidos. Al mismo tiempo estas ricas mermeladas y gelatinas cosméticas se meriendan tus células muertas .
¿Para qué sirven los peelings o exfoliantes? Cualquier exfoliante corporal, sea o no de frutas, estimula la renovación de la piel. Debe eliminar con suavidad las células muertas y las impurezas de la superficie de la epidermis. La piel, limpia y exfoliada, respira mejor. Queda suave, más lisa y mejor preparada para asimilar un cosmético hidratante.
Si vas a aplicar un tratamiento anticelulítico o reafirmantes verás como sus beneficios también aumentan gracias a la exfoliación.
Ahora es el momento perfecto para mudar la piel. Busca el momento para darte una ducha larga o montarte el hammam en casa, justo después de un buen baño. Sobre la piel limpia y humeda empieza a exfoliarte por los pies y ve subiendo hasta el escote masajeando todo el cuerpo con el exfoliante. Al terminar la exfoliación y con la piel estimulada, aclara con agua lo más fresca posible.
¡Por fin ha llegado la hora de exfoliarse!