Tras siglos de historia en Europa, Cire Trudon abre las puertas de su aromática tienda insignia en el barrio de Nolita en Nueva York.
Tu madre se merece que le pongas un piso o, al menos, unas velas, y esto es así aunque el Día de la Madre sea un invento comercial. Los aromas y velas perfumadas son todo un regalo especial.
Si cuidáramos el propio ambiente como si de nuestros pabellones auditivos se tratase, tan bien perfumados ellos con toda clase de flores y extractos esenciales. Ay, si nos regalara una mano amiga unos difusores de aromas para el hogar.
Cada temporada invernal, las velas perfumadas nos encienden los ánimos. Prenden la mecha de las jornadas caseras de puertas abiertas, avivan las conversaciones agudas y arrojan luz a los claroscuros de la razón.
Del manga a la animación tradicional, de los animales domésticos al arte pop, Shu Uemura encuentra inspiración en todas partes. Su última fuente: la diseñadora Yaz Bukey, conocida por sus joyas con motivos de bocas entreabiertas, ojos trepidantes o piernas femeninas con ligas y tacón, entre otros iconos pop.
Roses será el último aroma incandescente salido de la factoria Diptyque, una de las firma francesa de velas decorativas más arty, cool and chic que conozco. No me olvido de Cire Trudon, el otro gran icono de las velas con historia y tradición. Amor, vino, rosas y un poco de luz interior y exterior en una misma […]
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