Una mujer (o ‘persona menstruante’, como se dice con más precisión) tiene la regla más de 30 años de su vida. Disponer de productos para la menstruación variados y adecuados a un precio justo debería formar parte de la agenda política de todos los países.
Los productos para la menstruación viven una edad de oro. Al menos, en los países desarrollados, donde se puede encontrar soluciones al alcance de la mano como las que vamos a ver en este post.
Ah, la regla y sus accesorios. Nuestra más íntima ‘amiga’, nuestro medidor de salud físico y mental. Dejaremos fuera de la ecuación, en este caso, cómo nos relacionamos con ella para ceñirnos exclusivamente a cómo atravesamos ‘esos días del mes’ y qué productos nos solucionan la vida.