Limpios, éticos y sostenibles con el planeta, así son los cosméticos de la nueva era de la belleza holística.
La influencia del Covid-19 acelera la conciencia cosmética exponencialmente. “La agenda de la sostenibilidad ha cambiado, nuestro futuro depende de los “límites planetarios”, y la ambición de las empresas debe estar a la altura del reto al que nos enfrentamos” dicen desde L´Oréal for the future, porque el medio ambiente también lo vale.
Nacen, crecen y se reproducen nuevas marcas veganas con fórmulas naturales, bio y a ser posible, orgánicas. Los sellos verdes inundan las etiquetas de los productos de cosmética. Sin duda hay un rebrote de cosmética ecológica. Algunas firmas clásicas se están reciclando con nuevas gamas de cosmética natural y más puras que de costumbre. Otras marcas vienen desarrollando la filosofía natural desde principios o finales del siglo XX: The Body Shop, Weleda (1921), Dr. Hauschka, Lush, Aveda, Clarins, Alqvimia, La Chinata, Amapola Bio, Archangela, Varanski Naturals, Yves Rocher, Korres, L´Occitane, Apivita, Jowaé, Lalita…
¿Será que ahora todos nos estamos dando cuenta de la importancia del cambio climático que vive el planeta y cómo nos afecta a todos?
Más vale darse cuenta tarde o al límite de una situación de no retorno como la que estamos viviendo del Ártico a La Antártida o el Mar de Aral.
¡Arriba la cosmética sostenible!