El efecto Tech Neck y otros daños colaterales derivados del uso y abuso de las tablets, móviles y otro gagdets.
Si hubiera que explicar la vida terrestre a un marciano perdido en la ciudad lo haríamos en dos palabras: “smart” y “phone”. Los estadistas aseguran que los jóvenes emplean unos 210 minutos diarios en interactuar con su móvil, lo que supone una tensión constante para el cuello. ¿Las consecuencias visibles a largo plazo? Una constelación de arrugas dispuestas en surcos, ‘anillos de Venus’, las llaman no sin cierto lirismo.
El cirujano plástico Moisés Martín Anaya nos explica qué se puede hacer con ellas en su clínica de medicina estética.