Las bandoleras, la piel con efecto cocodrilo, la inspiración de los 70 y los bolsos hechos y teñidos a mano marcan la tendencia en el accesorio que esconde nuestra personalidad.
Tras cinco años de reinado se acabó la fiebre del shopping bag, tan útil para llevar desde los que quesitos light hasta el Ipad. Este otoño invierno llegan bolsos más escuetos pero más coquetos. Desde la emblemática bandolera de los 70, que me recuerda a Françoise Hardy ya las azafatas de Iberia de entonces, hasta la piel grabada con efecto serpiente, cocodrilo, animal print… Riñoneras para ir en moto y bolsos hechos a mano con piel ecológica que luego se colorea con tintes naturales sin productos químicos. Un toque vintage y un abanico muy amplio de modelos. Seguir leyendo…