La Nueva Humanidad se parece mucho a la vieja en términos de acumulación de grasa. Pero tranquila: hay muchos platos de chiringuito que puedes comer sin preocuparte por engordar.
Te has pasado el confinamiento explorando el ángulo exacto en el que las sentadillas son realmente eficaces, y ahora no estás dispuesta a tirar tanto esfuerzo por la borda. Relaja cuerpo y mente: disfrutar de una comida en el chiringuito sin engordar es más que posible.
Quizá este año engordar o retener líquidos sean las últimas de tus preocupaciones. Quizá poder estar al sol en algún chiringuito de la orografía española te parezca un regalo. Sin duda lo es, pero no es necesario envolverlo en un lustroso rollo de grasa en torno al ombligo. Y comer fuera, en un chiringuito o en una callejuela de la ciudad, siempre entraña cierto ‘peligro’, especialmente si se repite y repite a lo largo de la semana.