Acepté el reto de Proveg de una semana sin comer carne y estoy feliz, más sana y con menos toxinas.
La semana sin carne va más allá de la mera alimentación saludable para entrar en el campo de la concienciación ecológica. No sólo sobre el gasto de agua y energía que supone la ganadería o la matanza de animales. También por la incidencia en el cambio climático y por las presentes y futuras pandemias zoonóticas que nos acechan, desde el Covid-19 a la gripe aviar, porcina o el SARS. El vínculo entre la industria ganadera y los mercados de animales suponen un mayor riesgo de pandemias y es algo que ya está demostrado científicamente.
¿Ante tanta pandemia, acabarán por prohibir el consumo de carne, además de confinarnos?