
En los Grammy este año
La belleza vuelve a aliarse con una fierecilla de los escenarios. Nada como maridar el maquillaje cañero con estrellas del pop con un estilo perfectamente reconocible, deben pensar los astutos responsables de marketing.
Esta vez es Gwen Stefani, del mítico grupo de los 90 No Doubt, quien escribe su nombre junto a otro con mucha identidad: Urban Decay. Se trata de la primera vez que la firma abre su casa a una diseñadora de estas características. No hacía falta excusa, pero sí alguna que otra razón del corazón, quizá anclada en una trayectoria de mutua conquista, en una historia de reconocimiento de los méritos del otro…
Nacieron a la vez y desde entonces se han estado observando, admirando su capacidad para “crear olas” en sus respectivas industrias. Una colaboración con celebritie es un escenario conocido. Esta pequeña historia hace de ésta algo un poco más especial.