Un simple corte de pelo, arriesgado, eso sí, pero un simple corte de pelo, hizo que Emma Watson dejara sorprendidos a propios y a extraños.
Acudió a la premier en Londres de la penúltima entrega de la saga Harry Potter con su nuevo look (bueno, en realidad se hizo el corte en agosto pero parece que nadie se había dado cuenta hasta ese momento) y un vestido espectacular y de repente, a ojos de todos dejó de ser una niña. La amiga del mago más famoso de todos los tiempos se ha hecho mayor y luce encaje, transparencias, vestidos mini, plumas y espaldas de vértigo, un diseño, por cierto, con el sello español del modisto Rafael López, subida en unos altísimos tacones de Charlotte Olympia. Seguir leyendo…