Después de varios tratamientos faciales que me han llevado a tener la piel como la seda, me decido a degustar los tratamientos para la operación biquini. Una sesión detox a última hora de la tarde para depurar grasas, toxinas y de paso mejorar la circulación.
Por aquello de que la vida del periodista no tiene agenda que no se pueda saltar a la torera una buena noticia de última hora o un cierre galopante, tuve que anular dos citas previas antes de probar el plan detox de Indiba . Pero a la tercera, llega la experiencia de la radiofrecuencia Indiba en directo, en un cuerpo a cuerpo sobre la camilla que exige relax y no ir al galope como yo.
Dios mío, qué trabajo te lleva a tener que desnudarte delante de un desconocido para que te manosee y unte todo tipo de lociones cosméticas o te deslice dispositivos de última tecnología estética a flor de piel por casi cada rincón del cuerpo. En fin, todo sea por vosotras.