Recuperemos la belleza de raíces profundas (a la par que un poco negras). Hoy te contamos cómo te puedes alisar el pelo en casa sin gadgets de peinado.
Quizá recuerdes a alguna de tus gloriosos ancestros enfrascada en la tarea de envolver la melena en una toalla. La toga, como se conoce popularmente a ese método tradicional de alisado, ofrece un resultado muy bueno en términos de control del encrespamiento y de cuidado del cabello y fatal en términos de practicidad. Hacía falta poco más o menos un día entero para que la toga operara ‘el milagro’ de secado y alisado del pelo. Pero, como ahora pasamos mucho tiempo en casa, puede ser buen momento para rescatar este método y valorar aún más a nuestras abuelas. ¡Y todo, sin plancha!