Se conoce como ‘envejecimiento digital’. La luz azul que emiten los muchos dispositivos que utilizamos a diario podría estar acelerando el proceso de envejecimiento de tu piel. ¡Hasta ahí podíamos llegar!
Es un hecho inapelable: la luz azul, sumada a las posturas que adoptamos al usar los dispositivos electrónicos, nos está dejando cara de pasa.
¿Alguna vez se te ha ocurrido contar las horas que pasas con tus dispositivos electrónicos de cabecera? Pueden ser tranquilamente unas 10 diarias, y no exagero un pelo. Se ha demostrado que la luz azul que emiten los ordenadores, tablets, móviles y televisores alteran los ciclos circadianos y afectan, y mucho, al estado de la piel. ¿Los síntomas? Te los contamos con la ayuda de Marta García, titular de Marta García Esteticistas (Oviedo).