La cuenta atrás hacia la Navidad ha comenzado. Quien más, quien menos (a esos impíos nos dirigimos), va tomando nota de los deseos de sus seres queridos con el ánimo de obsequiarles opíparamente, so pena de que se les aparezca el fantasma de las Navidades pasadas a reprocharles su cicatería.
Muchas firmas de belleza empaquetan juntas algunas de sus mejores soluciones cosméticas. Me encanta la idea, ahora o en cualquier otra fecha: los cofres son bonitos, grandes, brillan, son divertidos de abrir… Me ponen, confieso a micro abierto.
Te mostramos unos cuantos cofres navideños ‘de pata negra’, para que recuperes el sagrado espíritu de la abundancia y te regales la alegría de ofrecer -del amor y la amistad sin esperar nada a cambio ya hablaremos otro día-.