Ganar elasticidad en la piel es primordial para que una reconstrucción mamaria sin cicatrices sea efectiva. Ahora con Cellu M6 de LPG se logra que un pecho reconstruido tras un cáncer no tenga esas cicatrices ni ninguna adherencia y que la recuperación sea menos traumática.
En España solo un 30% de las mujeres con cáncer de mama que han sufrido una mastectomía reconstruyen su pecho. Estos son los datos que ofrece la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE). El 31% no lo hace por el miedo a las complicaciones y a la recuperación postoperatoria. El otro 50,9% de los casos, porque no siente la necesidad de hacerlo.
Sin embargo, para las que sí buscan la reconstrucción mamaria todo puede hacerse más sencillo con un tratamiento de LPG, el Cellu M6. Este es un aparato que se lleva usando desde hace años para combatir la grasa localizada, la celulitis o para reafirmar el tejido. Este método no añade cicatrices ni complicaciones y permite la reconstrucción mamaria con un mínimo riesgo quirúrgico. Además, los ingresos hospitalarios son más cortos y el tiempo de recuperación tras la operación se reduce.