La contaminación supone un reto diario para nuestra piel.
Quienes vivimos bajo la gruesa capa de polución que se genera en las grandes ciudades sabemos de lo que hablamos. Es esa sensación de suciedad, asfixia y taponamiento, esa sensación de oclusión. La misma que afecta a nuestras vías respiratorias y a nuestro órgano de mayor tamaño: la piel.
Conscientes de que esto no hay quien lo pare –y de que lamentablemente no podemos aislarnos en una burbuja estilo la cabaña de Heidi-, diversas firmas de confianza atienden la demanda de las pieles urbanas con fórmulas diseñadas para proteger, combatir e incluso revertir los efectos de la contaminación sobre nuestra piel. Demos paso al DEFCON 2 cosmético: he aquí unos cuantos escudos contaminación, invisibles pero ¡muy efectivos!